¿Sabías que la música es una parte importantísima del ambiente que creas en tu centro de estética? Una buena selección musical forma parte del conjunto de estímulos sensoriales, que dan calidez a un salón de belleza y procuran la relajación y el bienestar de tus clientes. Hacer una buena selección musical pasa por una investigación, en la que deberás tener en cuenta no sólo los derechos de autor de las canciones (que sabemos que os preocupan), sino también las sensaciones que pretendes transmitir con ella. Debe ser música de ambiente, que contribuya a crear una atmósfera determinada, que concuerde con el estilo de tu salón o spa, así como con el tipo de tratamientos que ofreces. ¿Quieres saber cómo escoger la adecuada en cada caso? ¡Sigue leyendo!
Cómo utilizar la música para vender más
Ha quedado demostrado en varios estudios que los clientes pasan más tiempo en tu centro y compran más, si los estimulas con la selección musical adecuada. Con ella, conseguirás que tu salón adquiera un aire más atractivo y además, que tus clientes se sientan a gusto y quieran volver. Antes de realizar tu selección musical deberás tener en cuenta:
- la edad y gustos de tu público objetivo
- el tipo de tratamientos y productos que vendes en tu centro
- el día de la semana (no utilizaremos la misma, probablemente, entre semana que un sábado)
- tus empleados, trabajan más relajados y motivados, si escuchan música
Una vez has tenido en cuenta estos aspectos preliminares, vamos a darte 6 tips que te ayudarán a escoger las melodías perfectas para tu centro de estética (peluquería, salón de belleza, clínica de estética o spa). ¡Toma nota!
1. La melodía, siempre en segundo plano. No estás en una discoteca o en un bar. Ésta debe quedar como fondo, difusa y suave. Como hemos comentado anteriormente, ésta es como el perfume o aroma del ambientador, que has escogido para tu salón. Puro marketing sensorial. Los clientes no deben prestar atención a lo que suena, sino relajarse.
2. Cuidado con el volumen. La ambientación musical debe ser tenue, agradable y relajante. Ten en cuenta que ésta debe enmarcar tu actividad, no solaparla; debes poder hablar y utilizar secadores, sin que la melodía prevalezca y genere ruido.
3. El ritmo también es importante. En este caso, a la hora de escoger un ritmo o estilo, deberás tener en cuenta la edad de tu público y el tipo de tratamientos y productos que ofreces en tu negocio. Los mejores estilos para crear una atmósfera agradable en tu centro son el smooth jazz, el chill out, alguna melodía de piano e incluso, la bossa nova.
4. Esperando sí, pero con melodías agradables. Tus clientes antes de empezar su tratamiento deben esperar un rato. Haz este momento más llevadero con temas musicales, que les entretengan y les haga sentir cómodos, al mismo tiempo. Canciones y sintonías bonitas, revistas y su bebida favorita. ¡Un éxito! Podemos decir lo mismo del instante espera al teléfono mientras lo coges la llamada y lo atiendes. En vez de ofrecerle un instante de silencio o un tono automático, recíbele con un mensaje corporativo y una sintonía acorde, que haga más ligera su espera.
5. Una selección musical relajante, pero motivadora. Nadie quiere escuchar una melodía nostálgica y deprimente, mientras se cuida. Tus clientes deben asociar el servicio recibido con una música delicada y suave, pero motivadora y positiva. La experiencia de cliente es un todo y debes cuidarla, mimando cada detalle. Piensa en cómo te gustaría sentirte mientras te peinan, te hacen un masaje o te hacen una limpieza facial. Tu centro debe ser un templo dedicado al bienestar.
6. Sonidos evocadores para cada momento y tipo de centro. Hay temas musicales que combinan sonidos de la naturaleza con melodías, para crear una atmósfera muy natural, suave y relajante. Otros realizan adaptaciones de melodías conocidas y las llevan a un estilo diferente más difuso y ligero. La clave está en acertar con la sensación que pretendes transmitir en cada momento.
Por ejemplo, no pondrás la misma en una cabina de masaje o de limpieza facial, que en un salón de uñas. La primera requiere de una sintonía con un ritmo más lento (p.ej. música chill out o de meditación), mientras que en la segunda, podrás utilizar una melodía más motivadora y con un ritmo un poco más acelerado (como la bossa nova, el smooth jazz o un sonido electrónico).
Puedes combinar listas más genéricas, con canciones que motiven al equipo o a tus clientes. Puedes realizar una lista personalizada con Spotify Premium, YouTube e incluso, con canciones libres de derechos, como FreeMusic Archive. Investiga, prueba y comprueba el impacto de tus listas de reproducción en tu ritmo de ventas. Un cliente relajado compra más a gusto; un empleado motivado, vende más y es más eficiente. ¡No lo olvides!
Si quieres saber más sobre cómo aumentar tus ventas, te recomendamos la lectura de este completo e-book, creado por flowww. Es muy entretenido y va lleno de ejemplos que podrás aplicar en el día a día de tu centro, ¡te encantará!
